miércoles, 22 de junio de 2011

Apareciste tú.

No había nada en mi vida que me hiciera sentir viva, no había nada en mis días que me hiciera sonreír o llorar.
Apareciste como un soplo de aire fresco, como un lienzo perdido que ahora encuentro.
Contigo sé que puedo vivir y comenzar a caminar
Ahora es tiempo de mirar hacia delante, comerme el mundo y sentirme importante. No será difícil si creo en mí.
Aquí estoy yo firmando mis sueños, riéndome de los malos momentos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario